La Universidad Autónoma de Occidente, UAO, recibió recientemente la patente otorgada por la Superintendencia de Industria y Comercio para un innovador método de producción de bioláminas orgánicas, un material 100% natural, compostable, biodegradable y renovable, diseñado para sustituir empaques de un solo uso. Este avance fue desarrollado por un equipo liderado por la profesora Luz Marina Flórez Pardo junto a las egresadas Jennifer Romo Hernández, Laura Cadavid Carrillo y Ana María Canchilla Navarro de la facultad de Ingeniería y Ciencias básicas de la UAO.

“Mientras hacíamos pruebas en clase, vimos el potencial para desarrollar bioplásticos a partir de la lechuga. Desde ahí comenzamos a trabajar en un material que no solo reutilizara residuos de alimentos, sino que también cumpliera con los principios de sostenibilidad y cuidado ambiental”, explicó la docente Marina Flórez.

Con el tiempo, el proyecto evolucionó gracias al trabajo en el Semillero de Aprovechamiento de Biomasa, permitiendo ampliar la investigación a otros tipos de residuos orgánicos, como remolacha, zanahoria, cebolla, repollo, café, entre otros. El material resultante, que no contiene plastificantes ni pulpa de celulosa, destaca por sus propiedades como impermeabilidad al vapor de agua, resistencia a sustancias químicas y aislamiento térmico y sonoro.

Esta tecnología que hace parte de la Spin-off de Nateco S.A.S, no se puede catalogar como un bioplástico porque no tiene plastificante, ni tampoco como un papel porque no proviene de pulpa de celulosa.

Jesús David Cardona Quiroz, vicerrector de Investigaciones, Innovación y Emprendimiento de la UAO, destacó la relevancia de este logro:

“Esta patente no solo reafirma el compromiso de la Universidad con la sostenibilidad, sino que también representa un triunfo para nuestras investigadoras y egresadas. Es un ejemplo de cómo la ciencia y la innovación pueden transformar los residuos en soluciones concretas para los desafíos ambientales actuales. Este es el inicio de un largo camino para llevar esta tecnología al mercado y generar un impacto real.”

La Universidad continúa avanzando hacia el objetivo de transferir conocimiento al sector productivo y ofrecer soluciones que respondan a las necesidades de la sociedad y del planeta.

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